Que nunca nos tocamos los unos a los otros lo suficiente. Hay personas que, sólo al morir, se darán cuenta de que no han besado ni han sido besadas las veces que les correspondían; de que no se han enternecido, ni emocionado, ni llorado con otros, ni reposado en otra boca, ni dado la razón por gusto, ni dicho unas palabras dulces y aromáticas, ni arrullado igual que un palomo las veces que debieran... Porque, mira, eso es ser de verdad humano. Y lo más doloroso es advertirlo cuando ya es tarde y no hay remedio; cuando hemos echado de nuestro alrededor los ojos, los labios, el cariño, las manos, los compinches que habríamos tenido que atender.
La regla de tres
Antonio Gala
viernes, 2 de agosto de 2013
Reportaje fotográfico
Un merecido homenaje a Luchino Visconti. Lido, Venecia (40 x 30)
Luchino Visconti, grande entre los grandes.
ResponderEliminaruna foto preciosa.
ResponderEliminarEn el fondo, tiendo a una cierta mitomanía, paseando por la playa, sólo veía fragmentos de Muerte en Venecia
ResponderEliminarY envolviendolo todo la musica de Mahler
ResponderEliminarQue tiempos aquellos en que el arte se escribía con letras mayúsculas...
EliminarEs uno de mis directores favoritos. Preciosa imagen.
ResponderEliminarCompruebo que sigue teniendo muchos seguidores. Muchas gracias.
EliminarLa composición muy lograda...
ResponderEliminarTener paciencia y mirar a tu alrededor hasta encontrar la instantánea,
EliminarVisconti, magnifico registra. Bellisima foto
ResponderEliminar